'Star Trek: En la oscuridad' (2013) - Kirk, Spock y una nueva aventura

 La verdad es que nunca me he considerado una “trekkie”, por eso, cuando en el año 2009 se estrenó la primera entrega de lo que parece que va a ser una trilogía, decidí ver el “reboot” de ‘Star Trek’ sin prejuicio alguno, y lo que vi, me encantó. Lo mismo ha pasado con la secuela: ‘Star Trek: en la oscuridad’. J.J. Abrams vuelve a realizar una película entretenida, con ritmo, una impresionante banda sonora y con unos buenos personajes que forman una particular “familia”. Aunque he echado en falta algo de innovación en algunas de las escenas, esta nueva entrega tiene los ingredientes suficientes para ser un buen blockbuster.

La cúpula de la Federación ha sido víctima de un grave ataque terrorista por lo que ahora está sumergida en una crisis. La tripulación del U.S.S. Enterprise tendrá que hacer frente a la complicada misión de capturar al autor del ataque. Cualquier pequeño error podría dar inicio a una guerra.

‘Star Trek: En la oscuridad’ es una entretenida de principio a fin. El fugitivo Khan (Benedict Cumberbatch) es uno de los puntos fuertes de la película. Él realiza la mejor interpretación de esta entrega creando a un más que interesante y vengativo villano. Un personaje que manipula tanto a la tripulación como al espectador. Creo que hay ciertas similitudes entre Kirk (Chris Pine) y Khan. Ambos querrán vengarse, por distintos motivos, y los dos hacen todo lo posible por proteger a su tripulación o como ellos dicen “su familia”. En esta entrega los dos actúan influenciados por un sentimiento de rabia y de venganza.

Por otro lado, volvemos a disfrutar (y por qué no decirlo, sufrir) con el bromance entre Kirk y Spock (Zachary Quinto). Sus métodos son opuestos, discuten constantemente y la lealtad entre compañeros se pondrá en entredicho. Kirk siempre será impulsivo, mientras que Spock siempre justifica sus acciones o decisiones mediante el uso de la lógica. Si lo comparamos con la anterior entrega, puede que el personaje de Spock sea el que más ha evolucionado. El vulcano tendrá que controlar más que nunca esa parte humana que trata de ocultar.

El ritmo de la película es otro de los elementos que me ha gustado, ya que no decae y cuando parece que ya está todo “hecho”, un sutil giro argumental añade a la película un toque de suspense inesperado. Con esa decisión Abrams logra captar nuestro interés por completo y logra crear una parte final trepidante.

El mayor pero que le pongo a ‘Star Trek: En la oscuridad’ es, como ya he dicho antes, que hay alguna que otra escena que me ha parecido bastante similar a la de la anterior entrega, lo que crea cierta sensación de deja vú. Pese a eso, la película es emotiva, divertida, entretenida y con un punto de suspense muy acertado. Un paso más en el camino para crear una buena trilogía.

La nueva entrega empezará a rodarse en 2014. Esperemos que este a la altura de las anteriores.