'UNO, DOS, TRES' (One, Two, Three, 1961)

  Billy Wilder y la Coca-Cola

Son muchas las ocasiones en las que Billy Wilder trataba temas serios desde un punto de vista cómico, pero con la película "Uno, dos, tres" ocurrió algo curioso. Es una comedia sobre la Guerra Fría, grabada en Berlín en el año 1961. Casualmente, ese mismo año, se construyó el Muro. Ese hecho inesperado tuvo efectos negativos en la película ya que el público no tenía ganas de reírse de la situación; la película resultó ser un fracaso de taquilla y Wilder recibió alguna que otra crítica. Pero, como dice una gran frase de Woody Allen: "Tragedia más tiempo igual a comedia", y eso es lo que ocurrió. "Uno, dos, tres" se reestrenó en 1986, con gran éxito.

C.R. MacNamara (James Cagney) trabaja en Berlín, en la sede de Coca Cola. El objetivo de MacNamara es conseguir un ascenso para poder trasladarse a la sede de Londres. Cuando la hija de su jefe aparece en su oficina y le dice que se acaba de casar con un comunista, ve peligrar su ascenso. Todo lo que le rodea empieza a convertirse en un caos de idas y venidas. Una gran comedia.

¡UNO! Este es uno de los muchos trabajos que realizaron juntos Billy Wilder e I.A.L Diamond. Sabían cómo escribir buenas comedias. Sus guiones tenían historias y personajes bien estructurados, no había lugar para la casualidad, todo estaba justificado. Ambos tenían claro que "Uno, dos, tres" tenía que ser una comedia rápida, y para eso decidieron aplicar lo que dice su título a la historia: "Uno, dos, tres", las acciones tienen que ir una tras otra, tienen que ser efectivas, no hay lugar para el descanso, tienen que ir encadenadas; y así lo apreciamos. Una película que empieza tranquila y que va ganando ritmo según se va acercando al clímax.

¡DOS! Billy Wilder ha tratado en más de una ocasión el conflicto entre el capitalismo y el comunismo, entre Oeste y Este. En este caso, la acción se sitúa en un Berlín dividido. El director era un europeo que trabajaba en América, y siempre que podía hacia referencia a las diferencias entre la sociedad americana y la europea. Como siempre, Wilder crítica los dos sistemas, tanto el capitalista como el comunista mediante personajes y situaciones llevadas al extremo, los pone al mismo nivel, todos son unos hipócritas, uno de los personajes dice lo siguiente: "No vas a ser nunca un americano capitalista;  lo que serás es un comunista rico".

¡TRES! La película es en parte un homenaje a uno de sus mentores, Ernst Lubitsch. Wilder fue uno de los guionistas de "Ninotchka" (1939), en esta también vemos el conflicto entre el capitalismo y el comunismo, pero desde un punto de vista más cercano a la comedia romántica. Dos son las principales referencias hechas a la película de Lubistch: una de ellas es la presencia de un trío de rusos comunistas (algo torpes); la otra la "transición" del comunismo al capitalismo mediante la ropa. Me explico. En "Ninotchka" Greta Garbo cae en la trampa del capitalismo al comprarse un sombrero por puro capricho. En "Uno, dos, tres" el joven comunista y revolucionario se transformará en un elegante aristócrata cambiando su imagen en una de las secuencias más divertidas de la película.

Una comedia rápida y divertida, que no tuvo suerte el día de su estreno, pero que el tiempo la ha puesto en el lugar que se merece.