domingo, 8 de enero de 2012

'CENTAUROS DEL DESIERTO' (The Searchers, 1956)

centauros_del_desierto_plano_final


La escena final de 'Centauros del desierto'


'Centauros del desierto' es la traducción libre del título de una de las mejores películas de John Ford, 'The Searchers'. Esta escena no es una crítica a la película en general, sino un comentario y breve análisis de su final y todo lo que significa.

El final de 'Centauros del desierto' es memorable, pero además es muy significativo y emotivo. Uno de esos finales que queda grabado en la memoria de los cinéfilos y cinéfilas. En esa escena, Ethan Edwards (John Wayne), dejando atrás la civilización vuelve (solo) al desierto, al lugar al que pertenece. Tras la derrota en la guerra de Secesión, Ethan vuelve agotado. Se entera de que su sobrina Debbie (Natalie Wood) ha sido secuestrada por los comanches y junto a Martin (Jeffrey Hunter), van en su búsqueda. La trama es una excusa para mostrar otros problemas más profundos de la sociedad.

La película tiene una forma cuidada y el final tiene un significado enorme. Ethan no acepta la nueva sociedad integrada y mestiza. Vuelve con su sobrina en brazos pero no se quedará en una sociedad en la que no hay sitio para él, por eso se aleja. Martin, mestizo, se convierte en el reflejo de lo que significa la nueva sociedad. Todos entran en la casa menos Ethan. Él se marcha y le cierran la puerta. Sus viejas ideas han sido enterradas y es el momento de dar un paso al frente. Ese paso lo dan todos salvo él. Todo esto John Ford lo plasma a la perfección en la escena final, sin necesidad de palabras.

3 comentarios:

  1. es cierto que es una película magistral, a mi también me encanta.

    ResponderEliminar
  2. ¡Cuánto se ha escrito de la escena final! Bueno, y en general de toda la película. Tiene escenas antológicas: el inicio y el final con la puerta, cuando la cuñada de Ethan deja su chaqueta con todo el cariño encima de la cama... Una más de las tantas obras maestras de John Ford, increíble que no fuera ni siquiera nominada para ninguna categoría en los Oscar (lo he tenido que mirar).

    Hay pocos fotogramas que puedan quedar mejor en la portada de un libro sobre el cine del oeste. Dicen que John Ford adoraba la pintura, y en verdad este es uno de los mejores cuadros que se pueden ver en una televisión.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Otro ejemplo que los premios no siempre se otorgan a las mejores, y un claro ejemplo, de que la calidad de una película nada tiene que ver con los premios que acumule. Eskerrik asko por todos los comentarios!! ;)

      Eliminar