martes, 4 de febrero de 2014

'La gran estafa americana' (2013)

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¿Quién es el maestro? ¿El pintor o el falsificador?


Fraude, engaños, comisiones por trámites ilegales, falsificaciones, corrupción y también un poco de fiesta y amor; eso es lo que ofrece la última película de David O. Russell; un director que sin querer se está ganando a pulso la etiqueta de realizador “mimado” de los académicos de Hollywood. ‘La gran estafa americana’ ha conseguido nada más y nada menos que 10 nominaciones a los Oscars. El año pasado, el director logró 8 nominaciones gracias a la comedia dramática ‘El lado bueno de las cosas’; y en 2010 consiguió otras 7 con ‘The fighter’. Las tres comparten historias interesantes y unos personajes con los que, en mayor o menor medida, es fácil empatizar. Ante tanta nominación lo normal es tener ciertas expectativas ante sus películas. Pero esto también puede (y suele) jugar en contra del resultado final; y en ese caso, lo hace.


Irving Rosenfeld (Christian Bale) es un estafador que controla bastante bien su negocio. Es un hombre honesto, amable y se podría decir que con “corazón” (curiosamente padece problemas cardiacos). Conoce el terreno en el que se mueve y sabe cuándo no es conveniente cruzar la línea. Se mantiene alejado de la mafia y la política. Irving está casado con Rosalyn (Jennifer Lawrence), una mujer complicada e impredecible. Irving todo lo hace por el bien de su hijo. Rosalyn lleva años callando y estando a la sombra de su marido, pero ahora ha decidido formar parte del juego.

A Irving le acompaña Sydney Prosser (Amy Adams), su cómplice de engaños y también amante. Richie DiMaso (Bradley Cooper), un agente del FBI, detiene a la pareja pero a cambio de su libertad les propondrá un interesante trato. Si Irving ayuda al agente del FBI a dar caza a cuatro políticos corruptos de Nueva Jersey, les dejará libres. Las circunstancias obligan a Irving a meterse en un mundo de corrupción política que odia. Al final, ¿quién se lleva los elogios, el que ha organizado y creado “la obra” para cazar al corrupto, o el que se encarga de meter mano y le da la última pincelada al plan?

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Lo más atractivo de la película es el reparto, y es que O. Russell me parece un buen director de actores. Christian Bale, Amy Adams, Bradley Cooper, Jennifer Lawrence y Jeremy Renner protagonizan esta comedia ambientada en los años 70. Amy Adams es la reina de la película. La amante que quiere empezar una nueva vida junto a Irving, pero que tiene la obligación de interpretar un papel, de inventarse una identidad, hecho que en ocasiones le resulta agotador. Una mujer en apariencia fuerte, que sabe cómo manejar y “calentar” al agente del FBI. Bradley Cooper también realiza un trabajo interesante. Su personaje tiene energía, es ambicioso y quiere lograr el éxito en su campo de trabajo. Al igual que el personaje de Adams, tendrá que interpretar un papel. Y es ahí cuando se da un cambio curioso en los personajes. El agente del FBI disfruta de su aventura como chico malo; mientras que el personaje de Christian Bale, que lleva años estafando, intenta jugar de la forma más correcta posible para evitar problemas mayores.

Del camaleónico Christian Bale poco que decir, no es uno de sus mejores trabajos, pero convence. Para terminar tenemos a Jennifer Lawrence (actriz odiada y amada a partes iguales), en un rol bastante secundario, pero que protagoniza uno de los grandes momentos de la película.

Esperaba que ‘La gran estafa americana’ fuese más entretenida, que tuviese más “chispa” por así decirlo. Su punto débil es el guion, al que le falta fuerza. Hay escenas que resultan largas y que parecen que no llevan a ninguna parte. La dirección de David O. Russell es sencilla, los actores cargan con el peso de la película. En conjunto, me parece una película interesante y que tiene algún que otro gran momentazo, además de una banda sonora espectacular (como las de todas las películas de O. Russell), pero que flojea o pierde fuerza en su desarrollo.

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